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Problemas digestivos

Problemas digestivos asociados a la obesidad

La obesidad es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo y tienen una gran relación con los problemas digestivos. La obesidad no solo genera molestias físicas, sino que también pueden conllevar complicaciones graves, como por ejemplo la acidez estomacal y las digestiones pesadas, las alteraciones hepáticas y las afecciones en el esófago1.

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 Problemas digestivos asociados a la obesidad

Acidez estomacal y digestiones pesadas

La acidez estomacal y las digestiones pesadas son problemas digestivos frecuentes en las personas con obesidad. La acumulación de grasa abdominal ejerce presión sobre el estómago, lo que puede provocar el reflujo gastroesofágico, los ácidos del estómago regresan al esófago, causando ardor y molestias. Además, las digestiones pesadas suelen estar relacionadas con una dieta llena de grasas y azúcares, que ralentizan la digestión y generan sensación de hinchazón y malestar abdominal2.

El reflujo gastroesofágico no solo afecta la calidad de vida, sino que también puede derivar en complicaciones más graves, como la esofagitis, una inflamación del esófago causada por la exposición prolongada a los ácidos estomacales3. También las digestiones pesadas pueden ser un síntoma de dispepsia funcional, una condición que se agrava con el consumo excesivo de alimentos ultraprocesados y la falta de actividad física.4

Alteraciones hepáticas

El hígado es otro órgano que sufre las consecuencias de la obesidad. Uno de los problemas digestivos más comunes es Enfermedad Hepática Esteatósica Asociada a Disfunción Metabólica (MASLD, por sus siglas en inglés: Metabolic Dysfunction-Associated Steatotic Liver Disease), que se caracteriza por la acumulación de grasa  e inflamación en las células hepáticas. Esto puede derivar en una esteatohepatitis, una inflamación del hígado que si no se trata puede derivar en cirrosis o incluso cáncer hepático5.

La obesidad y los problemas digestivos también están relacionados con un mayor riesgo de desarrollar cálculos biliares, que son depósitos sólidos que se forman en la vesícula biliar y pueden causar dolor intenso y complicaciones digestivas. Además, el exceso de grasa altera el metabolismo de los lípidos y las proteínas, lo que afecta a la función hepática y contribuye al desarrollo de enfermedades metabólicas6.

Afecciones en el esófago

Las afecciones en el esófago son otro grupo de problemas digestivos asociados a la obesidad. El reflujo gastroesofágico es una de las principales causas de esofagitis, una inflamación del esófago que puede provocar dolor al tragar y dificultad para ingerir alimentos7. En casos muy graves la esofagitis puede derivar en el estrechamiento del esófago, una condición conocida como estenosis esofágica8.

La obesidad también aumenta el riesgo de desarrollar adenocarcinoma esofágico, un tipo de cáncer que afecta el revestimiento del esófago y que está muy relacionado con el reflujo crónico y la exposición prolongada a los ácidos estomacales9. Las personas con obesidad tienen mayor probabilidad de experimentar disfagia, una dificultad para tragar que puede ser causada por la presión ejercida por la grasa abdominal sobre el sistema digestivo, es por ello por lo que al detectar cualquier síntoma es importante contar con la ayuda de un médico experto para que pueda evaluar cada caso10.

Referencias
  1. Xie, C., Friedman, A. B., Kwon, J. H., Freedberg, D. E., & Green, P. H. (2024). Obesity is associated with higher prevalence of gastroesophageal reflux disease and reflux related complications: A global healthcare database study. Neurogastroenterology & Motility, 36(5), e14750.
  2. Singh, M., Lee, J., Gupta, N., Gaddam, S., Smith, B. K., Wani, S. B., ... & Sharma, P. (2013). Weight loss can lead to resolution of gastroesophageal reflux disease symptoms: A prospective intervention trial. Obesity, 21(2), 284-290
  3. Clarrett, D. M., & Hachem, C. (2018). Gastroesophageal reflux disease (GERD). Missouri Medicine, 115(3), 214-218.
  4. Carbone, F., Holvoet, L., & Tack, J. (2019). Dietary and lifestyle factors in functional dyspepsia. Nature Reviews Gastroenterology & Hepatology, 16(12), 727-738.
  5. Rinella, M. E., Lazarus, J. V., Ratziu, V., Francque, S. M., Sanyal, A. J., Kanwal, F., ... & Newsome, P. N. (2024). A multi-society Delphi consensus statement on new fatty liver disease nomenclature. Journal of Hepatology, 82(6), 1400-1411.
  6. Aune, D., Vatten, L. J., Boffetta, P., Deneo-Pellegrini, H., & Ronco, A. L. (2015). Body mass index, abdominal fatness, weight gain and the risk of cancer: a systematic review and dose-response meta-analysis of prospective studies. International Journal of Cancer, 136(4), E359-E386.
  7. MedlinePlus. (2024). Enfermedades del hígado. Recuperado de https://medlineplus.gov
  8. Mayo Clinic. (2025). Esofagitis: síntomas y causas. Recuperado de https://www.mayoclinic.org
  9. Singh, S., Sharma, A. N., Murad, M. H., Buttar, N. S., El-Serag, H. B., Katzka, D. A., & Iyer, P. G. (2013). Central adiposity is associated with increased risk of esophageal inflammation, metaplasia, and adenocarcinoma: a systematic review and meta-analysis. Clinical Gastroenterology and Hepatology, 11(11), 1399-1412.
  10. Singh, S., Richter, J. E., Bradley, L. A., & Haile, J. M. (2017). Gastrointestinal complications of obesity. Gastroenterology Clinics of North America, 46(2), 279-292. https://doi.org/10.1016/j.gtc.2017.01.006
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